Una visión eficaz permitirá mayor concentración

La visión es importante en todas las actividades que ejecutamos diariamente, pero principalmente en las horas que dedicamos al estudio, conducción, ordenador y deporte.

Por tanto, en el 90% de las horas en las que se mantiene despierta una persona activa laboralmente. Para ello se requiere de toda una serie de habilidades visuales que deben funcionar de la forma más eficaz posible para rendir al máximo, si no es así aparecerán una serie de síntomas que interferirán en el trabajo.

Para que la visión trabaje de forma adecuada, tenemos que  mejorar las condiciones del entorno:

• Iluminación: La sala debe estar bien iluminada y, si estamos leyendo, dirigir una lámpara de mesa a la zona de lectura de manera que no haga sombras.
• Distancia de trabajo: Cada persona ha de mantener la distancia de trabajo en relación con su altura. Para medirlo utilizamos la distancia del dedo corazón doblado al codo.
• Postura: Debemos mantener la espalda recta apoyada en el respaldo de la silla y las piernas formando un ángulo recto, para que los pies toquen el suelo.
• Descansos: Tanto cuando leemos un libro como con pantallas no debemos permanecer más de 20 minutos mirando a la misma distancia. Se ha de cambiar la mirada a una distancia lejana a ser posible mirando por la ventana.

Es importante realizar controles periódicos por el optometrista para valorar el estado de la visión y para detectar posibles problemas que estén alterando el buen funcionamiento de nuestras habilidades visuales.

Muchas veces encontramos toda una serie de síntomas que podemos relacionar en mayor o menor medida con un problema visual. Dolor de cabeza, sensación de mareo, dificultades de coordinación,  no se suelen asociar con problemas visuales, pero una mala coordinación ocular, problemas en los movimientos de los ojos o dificultades en el mantenimiento del enfoque suelen dar este tipo de síntomas que se pueden solucionar fácilmente con un diagnóstico y tratamiento adecuado por parte del optometrista.